El Árbol de la vida: eje del mundo

El Árbol de la Vida es una representación que encontramos desde los comienzos del ser humano. Simboliza la vida y ha sido estudiado en diferentes campos, entre ellos, la filosofía, la religión o la mitología.

El árbol se entiende como el eje del mundo: establece la comunicación entre el cielo (la copa y sus ramas) y la tierra (el tronco).

Tree of Life por InternetMonk // CC BY-NC-ND 3.0

Se sabe que los árboles tuvieron gran importancia en la cultura celta. Se albergaban en ellos, recogían la leña que alimentaba sus hogueras, asaban la comida que cazaban. El roble era uno de sus símbolos venerados y guardaban hacia él un profundo respeto. Desgraciadamente, esta cultura se ha transmitido durante generaciones por vía oral, por lo que la única información sobre estos conocimientos procede de historiadores romanos que, como cabe imaginar, interpretaban las cosas a su manera de verlas.

No sólo el roble era un árbol por los celtas; muchas otras culturas tenían un árbol que representaba el eje del mundo: los alemanes, el tilo; los escandinavos, el fresno; el olivo, los árabes; el banano, los hindúes; el abedúl, los siberianos, etc. Es un símbolo verdaderamente universal, y pertenece tanto al cristianismo como al judaísmo, al hinduísmo y budismo, a la civilización china, a las culturas australianos, a los egipcios y mesopotámicos.

Existe un árbol real conocido como "Árbol de la Vida" o la "Planta Milagro". Es el Árbol Moringa de La India (Moringa Oleifera) y de África (Moringa Stenopetala). No se conoce ninguna otra planta tan nutritiva y curativa en el mundo. Entre las propiedades curativas destacan su poder antiinflamatorio, analgésico, antiasmático, antianémico, protector del hígado, diurético, y mejora la concentración, la memoria y la capacidad de aprendizaje.

Se ha puesto de moda tanto llevar un collar con un Árbol de la Vida colgando como tatuárselo para siemre, dado que posee un significado fácilmente aplicable a las vivencias y creencias personales. Simboliza la vida de una persona y su comunión con la naturaleza y con la espiritualidad.